Jhoan Durán va a sentir envidia.

Traducido por Fernando Battaglini

El lunes por la noche en Chicago, los Twins blanquearon a los inconsistentes Cubs 3-0. Fue la última actuación sólida de uno de los mejores cuerpos de lanzadores del béisbol. Los Twins tienen el quinto mejor DRA en la Grandes Ligas, a pesar de haber cojeado durante gran parte de la temporada con lesiones y bajo rendimiento plagando el quinto puesto en su rotación abridora y una serie de lesiones que agotan la profundidad de su bullpen. Minnesota tiene sus ojos puestos en un fin de semana de cuatro juegos contra Cleveland, líder de la división, este fin de semana, y podría llegar casi al nivel del mejor equipo del béisbol con una buena semana.

David Festa fue la historia más importante el lunes, lanzando cinco entradas con nueve ponches, pero hubo un problema cerca del final del juego. En la parte baja de la octava entrada, ganando 2-0, Rocco Baldelli recurrió a Jhoan Durán para enfrentarse al octavo, noveno y primer bateador de la alineación de los Cubs, en lugar del típico lanzador de la octava entrada Griffin Jax. Durán mantuvo a Chicago sin anotaciones y los Twins agregaron una carrera de seguro, en la parte alta de la novena. Luego, Jax salió a salvarlo, el octavo del año.

Esta situación no ha sido algo inusual, este año. Durán se perdió el primer mes de la temporada por una lesión en el oblicuo y, en su ausencia, Jax realizó un puñado de salvamentos. Incluso después de que Durán regresó, Baldelli lo facilitó nuevamente en el rol de cerrador, permitiéndole tomar situaciones de hold en la octava entrada en algunos juegos a principios y mediados de mayo. Parte de eso fue tratar de mantener al lanzallamas Durán en un horario que disminuyera el riesgo de volver a agravar la lesión o sufrir otra. No ha lanzado tres días seguidos desde julio pasado. Los Twins están demostrando cada temporada, a medida que avanza, que quieren evitar incluso usarlo tres veces en cuatro días. Usarlo en el octavo en ciertos juegos aseguró que entraría en ellos, haciendo su trabajo y permitiéndoles planificar la disponibilidad de su bullpen para el día siguiente, al mismo tiempo que les daba la oportunidad de no necesitar a Jax, en caso de que carreras tardías aseguraran la victoria y lo hicieran innecesario.

Otra parte, sin embargo, fue que Durán no lució tan formidable esta temporada como el año pasado. Mientras tanto, Jax ha irrumpido en escena. El año pasado, Jax estuvo genial, con 78 DRA en 65 y 1/3 entradas lanzadas y un 17.9% de %K-BB. Esta temporada, sin embargo, ha sido trascendente. Al comenzar el lunes, tenía un DRA de 69 en 48 y ⅓ entradas, y su %K-BB se había disparado al 27.4%. Eso es más alto que su tasa de ponches en cualquiera de sus temporadas anteriores de trabajo de relevo perfectamente aceptable. ¿Que pasó?

En resumen: el mejor lanzamiento del béisbol. Jax lanza fuerte, con una recta de cuatro costuras que alcanza las 97 mph y toca las 99, pero eso no es lo que lo separa. No, es su sweeper, que es una sierra circular. En las tablas de clasificación de StuffPro, el único lanzamiento que supera al sweeper de Jax en PitchPro (que incorpora movimiento, velocidad, efecto, lanzamiento y ubicación) es el cambio de Michael Wacha. Pero incluso ese lanzamiento, aunque tiene una tasa de swing esperada más alta y una tasa de abanicados esperada similar en los swings, es más susceptible a un contacto duro y dañino que el sweeper de Jax.

Lo que pasa con el lanzamiento rompiente de Jax es que es básicamente a la velocidad de una bola rápida. A 89 mph, su velocidad promedio es mayor que la de cualquiera de los 155 lanzadores que han lanzado al menos 100 sweepers. Zumba como un cutter o un slider duro, pero tiene un barrido promedio y una buena cantidad de profundidad. Sólo otros dos lanzadores tienen más efecto en su sweeper. La combinación de efecto, potencia y movimiento que ofrece es abrumadora para un bateador. Es por ese motivo, que los bateadores han fallado en el 43.1% de sus swings contra ese lanzamiento este año, pero también se trata de crear swings de protección débiles. De los 496 lanzadores contra quienes los bateadores tienen al menos 100 swings registrados bajo la nueva tecnología de seguimiento de bates de Statcast, Jax permite menos swings rápidos (75 mph o mayor velocidad de swing) que todos menos 17. Sólo tres lanzadores han permitido una velocidad de salida promedio más baja en bolas bateadas entre 10 y 35 grados de ángulo de salida en el sweeper y solo cuatro han inducido un ángulo de salida más bajo en bolas fuertemente bateadas en ese tipo de lanzamiento.

La principal diferencia (la razón por la que gran parte de este éxito es nuevo y por qué su tasa de ponches ha aumentado de 20 a 33.5% mientras que su tasa de boletos ha disminuido ligeramente a 6.2) es que Jax simplemente ha dejado de lado la precaución. y comenzó a lanzar el lanzamiento como si estuviera tratando de atravesar una pared de ladrillos. En promedio, ha aumentado 2.3 mph en comparación con el año pasado, sin ninguna degradación en el movimiento. Si es impresionante que pueda lanzarlo más fuerte que nadie y al mismo tiempo hacer que el campo se incline y se agite, lo es aún más que pueda lanzarlo más fuerte que él mismo y al mismo tiempo cumplir con el mismo estándar.

Sin embargo, hay algo más interesante a considerar. Jax está obteniendo resultados mejores, incluido menos boletos, en parte al realizar muchos menos lanzamientos en la zona, especialmente el sweeper. Ha adoptado un enfoque bastante simple, pero radical: lanzar todo muy fuerte, no darle tiempo al bateador para discernir entre dos opciones y hacer que esas dos opciones diverjan hasta los extremos.

Aquí es donde Jax ubicó sus rectas en 2022 y 2023:

Y aquí es donde llegaron sus sweepers en esas dos temporadas:

No está nada mal, por eso en esas dos temporadas, Jax no estuvo mal. Son rectas altas y duras y una bola rompiente que se aleja aproximadamente del mismo lugar. Pero aquí es donde lanzó sus rectas en 2024:

Aquí hay muchas menos fugas hacia el lado del brazo del plato. Jax, un capitán de la Fuerza Aérea, se sintió cómodo, comandando su recta hasta el cuadrante superior de la zona del lado de los guantes, que podría ser la habilidad más subestimada del lanzamiento. Aquí, por el contrario, es donde ha aterrizado sus sweepers.

La misma historia. El dominio de Jax sobre el sweeper ha mejorado mucho, aunque está usando esa mayor precisión para lanzar menos strikes reales. Los bateadores tienen que leer un lanzamiento con más de 2,500 RPM de giro en un parpadeo, porque uno va a clavar la zona a 98 mph y el otro va a girar a la izquierda, con fuerza, y lanzarse fuera de su alcance. pero casi a la misma velocidad. Es tan simple como parece el lanzamiento y, sin embargo, es extraordinario. Ha convertido a Jax en uno de los mejores relevistas del béisbol y al sweeper en quizás el mejor lanzamiento de la Liga. Jax y Durán, el favorito del año pasado en temas relacionados al material y ahora casi es noticia de antier, todavía representan un golpe 1-2 tan formidable en la parte trasera de un bullpen como cualquier equipo de la Liga. Es una de las razones por las que los Twins son muy peligrosos, incluso cuando apenas acechan en la segunda posición de Comodín en la Liga Americana.

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